Objetivo: insatisfacción ambiciosa.
Al cabo de la pretemporada blanquiazul tanto en Galicia como por tierras lusas, el equipo de Imanol finaliza ya la preparación amistosa para que comience lo serio. El sábado 17 arranca la Liga y a partir de ese partido es cuando se deben de empezar a sacar conclusiones y expresar sensaciones.
No creo que nadie sepa más sobre un tema que la persona que se dedica a ello y como ya avisó Idiakez en rueda de prensa: la pretemporada no está para sacar conclusiones sino para coger ritmo de competición. Hasta que la competición no arranque esto no empieza de verdad.
Entre la afición también ha corrido la voz de cuál es el objetivo de este año. Algunos piensan que es el ascenso y otros que la permanencia.
Ya aprendimos la temporada pasada que las jornadas y el partido a partido es lo que acaba determinando en el último mes de competición la meta que uno quiere alcanzar. Ni es ni será favorable hasta mayo proponerse un objetivo, sea el playoff o la permanencia, sino varios pequeños objetivos muy sencillos: el rival a rival. No pensar en el más allá.
Decir esto es sencillo y hasta se podría llevar a la práctica pero nunca establecerlo como modo de vida en un club que ha ganado una liga y ha representado a Galicia por campos como Old Trafford.
Mucha gente no se recupera de un fracaso. Nosotros hemos demostrado hacerlo, más de una vez. También hay los que no se recuperan de un éxito y esto es lo que no nos puede quemar. Aún no hemos logrado nada porque nuestro sitio no es solo el fútbol profesional, nuestro sitio está en primera división, molestando a los grandes y, quién sabe, si en el fútbol europeo.
No es solo caer y levantarse sino mirar hacia delante cuando estés arriba e ir hacia la siguiente colina más alta aún. Nunca acostumbrarse a mirar satisfecho hacia atrás observando y celebrando lo que has logrado ya.
